miércoles, 2 de enero de 2013

La conmovedora historia de Linda


Hace unos días supimos, a través del perfil de Facebook de Cristina Irina Muñoz, que habían dejado una perrita de 7 años en la perrera. Su compañero humano debía despedirse de ella para ir a una residencia de ancianos. 

Cristina pedía ayuda desesperada para sacar a la pequeña Linda de allí: "El abuelito ha dejado su tfno en la perrera porque quiere seguir sabiendo de su niña... pobrecito mio vaya historia más cruel y más horrible. Ha dejado su camita en la perrera para que se la pongan...La tenía como a una princesita, con sus vacunas al día, esterilizada, estaban todo el día juntitos.. Y ahora..."

La foto de la perrita, removía a cualquiera...


Linda en la perrera

Imaginad al abuelo dejando atrás todas sus cosas, su vida... y a su compañera durante 7 años.... Es imposible ponerse en la piel de una persona que en la recta final de su vida se ve obligada a dejar en la estacada a una amiga, que siempre ha estado a su lado, siempre le ha escuchado y querido... 

Y por otro lado, la incertidumbre de Linda, siempre calentita y mimada en una casa, y de repente en la soledad de una jaula... viendo a su compañero humano marchar llorando desconsolado...

Pues, como a pesar de todo, quedan muchos ángeles sin alas, supimos que en poco tiempo, una maravillosa familia decidió que Linda no merecía ese final. 


Linda de camino a su segunda oportunidad
Linda con su nueva familia
Pero para añadirle más ilusión a la historia, la nueva familia de Linda supo que Honorio, su amito, había dejado en la perrera su teléfono para que le contaran cómo iba la adopción de la peque. Y ni cortos ni perezosos decidieron planificar una visita a la residencia de ancianos.

El reencuentro pone los pelos de punta:



Cuenta Cristina: "Linda, cuando ha visto a Honorio se ha puesto a llorar de la alegría, no sabía ni qué hacerle y Honorio por su parte estaba igual.. Con sus ojitos llenos de lágrimas y toda su gratitud para nosotras sólo podía darnos las gracias una y otra vez.. 
Cuánto amor se respiraba allí..."


"La llama cariñosamente bichito y dice que como iban a sacrificarla si esta llenita de vida.. Iban los dos felices dando un paseito.. Linda moviendo su rabito, dando saltitos...."

Cuentan que Honorio pensó que nadie se fijaría en ella... que terminaría sacrificada...


Pura felicidad mutua...

Si tuviérais un tablón donde resumir los recuerdos que queréis tener en vuestros últimos años... ¿qué pondríais? Honorio lo tenía claro...


Tablón de la habitación de Honorio
Le había hecho la foto en un estudio fotográfico. Eso nos da una idea de que para él no era solamente una perrita... era la niña de sus ojos...

Yo no sé vosotros, pero yo no he podido parar de llorar mientras leía y resumía esta historia. Linda estará cuidada para siempre, Honorio estará tranquilo sabiendo que su princesa será querida... Pero me queda cierta amargura porque estas dos almas hayan tenido que separarse... ¡Se ve tanto amor!


Felicidad....

Si os ha llegado esta historia al corazón y queréis saber más de ella, desde su fuente original, pinchad aquí.

Yo me quedo con un resumen... la perrera es capaz de romper corazones no sólo perrunos, sino también humanos... Adopta. No compres. Seguro que salvarás a un perro, y quién sabe si también a un ser humano...

2 comentarios:

  1. Habría que adoptar al abuelo y a la perrita juntos, que desgracia de sociedad.

    ResponderEliminar
  2. Qué buena reflexión, Marta...

    ResponderEliminar